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No lo busquen más, 1984 ha llegado

Continuamos con nuestras participaciones en Radio Córdoba cada uno de los miércoles, donde el formato se ha reducido a nuestra participación de 10-12 minutos donde hablamos sobre tecnologías de la información y de la comunicación. Esta semana no nos hemos podido resistir a reivindicar sobre algo a lo que por tiempo, y creédnos que es una cuestión material de tiempo, no hemos podido dedicar algunas letras. Al menos el pasado miércoles, pude reivindicar en la radio y para una audiencia que seguramente no estará muy ducha en cuestiones tecnológicas. Nos referimos a la aberrante directiva que el pasado día 1 de diciembre, los Ministros de los 25 países de la Unión Europea de Justicia e Interior, aprobaron y que debe ser ratificada por parte del Parlamento de la Unión Europea. Bajo esta directiva, se trata de la obligación por parte de todos los ISPs y compañías telefónicas de almacenar todos los datos referentes a nuestras llamadas y logs en internet de cada una de las personas que nos encontramos conectadas. Es decir, mediante esta ley, se podrá tener información sobre si Menganito visita las páginas webs de Democracia Nacional o de Rebelion.org, si es gay, heterosexual o bisexual, si colabora en la Cordobapedia con información sobre las Puertas y Murallas del siglo XIX, o si chatea con chavales de 18 años sobre la juventud que viene. La decisión es un ataque frontal a los derechos civiles de todas las personas que nos encontramos conectados (hoy en día casi el 100% de la población). En aras de luchar contra el terrorismo, se pretende que los proveedores de Internet guarden durante seis meses el histórico de las páginas webs que visitamos. Ver para creer, para vomitar hasta la aberración. Y si encima les sumamos las presiones de la industria discográfica para que esta base de datos sea accesible para controlar lo que un usuario hace con su contenido multimedia, es para que los ojos nos salgan de las órbitas. Esta decisión significa que una grandísima parte de la población podrá ser diseccionada en cuanto a su intimidad, sus tendencias políticas, sus intereses personales y sexuales... Cargarse enteramente nuestra libertad y derecho a la intimidad que, en la sociedad del conocimiento del siglo XXI, se debe garantizar tal y como se consiguió en los últimos tres siglos. Esta medida es equivalente a tener cámaras que graben continuamente nuestros movimientos y que ésto se grabado en gigantescas bases de datos que sean accesibles posteriormente por terceros por si hubiera que investigar la relación con el terrorismo. O sea, vigilar a millones de personas para intentar atrapar a unos cuantos. Simplemente una barbaridad lo que se propone, el ataque más flagrante que puede ser dirigido a la sociedad civil para poder salvarnos. Suponemos que la comunidad política no entiende la trascendencia de la decisión que ha tomado, porque de lo contrario, nuestros representantes políticos están optando por el Gran Hermano del tirón como modelo de sociedad en el siglo XXI. Amarrémonos porque en la sociedad que viene pintan bastos. Estamos más controlados cada día y llegará el momento, donde parte de la sociedad, simplemente se desconecte de este mundo cada vez más ácido y que tiene que estar regido por los estándares del pensamiento único. Ya lo hemos advertido en muchos posts sobre la sociedad a la cual nos vamos encaminando. En la primera oportunidad, los legisladores han destrozado totalmente nuestra intimidad. Dentro de muchos años, se mirará para atrás y se tendrá esta directiva como un hito de cómo la sociedad se autorregula... Da asco Y da asco cuando nadie ha oído hablar de ésto profusamente en los medios de comunicación tradicionales y han pasado sin mayor pena ni gloria sobre el tema. Da vergüenza ajena recordar cómo toda la prensa antiamericana se lanzó a criticar al Gobierno de los EEUU cuando se propuso revisar las entradas y salidas de los alquileres de libros en las bibliotecas estadounidenses, y sobre ésto no han dicho ni mu, cuando esta iniciativa es el control llevado a la enésima potencia. Toca, y van "n", movilizarse contra este tipo de iniciativas....pero es que sinceramente, aquí no se da abasto. "Aquel pueblo que sacrifica libertad por seguridad no merece ni lo uno ni lo otro"Benjamin Franklin

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