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2ª columna en Radio Córdoba dedicada al turismo de la ciudad, el 30 de septiembre de 2008 Hace unos días el INE publicaba una encuesta en la cual se indicaba la caída de un 14% de los viajeros que habían llegado a Córdoba en agosto, incidiendo además, que el año 2008 había sido el primero en 18 años que el turismo extranjero había decrecido.Rápidamente y por parte de los dirigientes se identifica el culpable: la crisis, la madre de todas las excusas
Y siendo esto cierto, ¿no tendrá nada que ver el sector turístico cordobés en esta debacle? Recuerden por favor conmigo:* Todavía no tenemos Palacio de Congresos, y lo que te rondaré morena;
* el espectáculo de luz y sonido en la Mezquita, es una entelequia; * muchas de las campañas de promoción de productos turísticos se realizan entre cordobeses y no para turistas, repartiendo lujosísimos folletos en las puertas de El Corte Inglés;
* las presentaciones promocionales de Córdoba que se realizan fuera de la ciudad, se hacen frente a auditorios donde la gran mayoría son periodistas locales; etc, etc etc.
Vivimos un tiempo en el cual la asunción de responsabilidades por parte de los dirigentes, bien sean públicos o privados, brilla por su ausencia. Ante los ejemplos de inacción público-privada reseñados y ante tamaño fracaso, no ha llevado pareja ninguna dimisión, entonación de mea culpa, o petición de disculpas públicas Al igual que cuando estudiamos historia, se conoce a la etapa de Alhakén II como la etapa del esplendor omeya, la primera década del siglo XXI se conocerá como el la etapa de la mediocridad. ¿Apuestas? Yo, empeño mi reputación.
